Acudimos al matadero y granja situada en Jaén. Allí nos recibe M.T., la veterinaria.
A pesar de no ser día de matar conejo nos enseña el matadero por dentro. Acto seguido nos presenta a dos trabajadores que trabajan tanto en el matadero como en la granja. Después nos muestra las naves de la granja contigua al matadero, apuntando mientras caminamos hacia ellas que el complejo es ilegal debido a que no cumple el mínimo de distancia entre un matadero y una explotación de conejos, tal y como obliga la ley.
Minutos más tarde nos confiesa que cuando se llevó a cabo la inspección de sanidad para dar el visto bueno al proyecto “los veterinarios se callaron como perros porque es política pura”, dejando así patente que las instalaciones no cumplen con los requisitos de sanidad.
La granja se divide en seis naves contiguas. Son instalaciones muy precarias. Las instalaciones están muy sucias y descuidadas, las deyecciones fluyen a través de algunos pasillos entre hileras de jaulas. Observamos muchos bebederos rotos que gotean. Muchas de las jaulas están oxidadas, comederos incluidos. Observamos que esta granja comete muchas irregularidades, manteniendo el pienso dentro de las naves, recogiendo los animales muertos en sacos de pienso o fumando los trabajadores dentro de las naves, entre otras.
En todas las naves nos encontramos con varios animales en muy malas condiciones. Con heridas en patas y orejas, enfermedades de la piel y algunos incluso agonizando durante lo que serán sus últimas horas de vida. Ni la veterinaria ni las dos personas que trabajan con ella hacen nada por mejorar la situación de los que están enfermos. Según ella, “hablando de coste no tienes necesidad de gastar medicamentos, es más fácil sacrificarlos […] Porque por el valor que tiene la coneja no se merece tener un tratamiento. No puedo gastarme más dinero en medicación que el valor que tiene el animal. Directamente lo sustituyo”.
Documentamos como la veterinaria, tras avisarnos de que no podíamos grabar porque lo que va a hacer “es maltrato animal”, coge una madre enferma y la golpea contra el suelo varias veces hasta acabar con su vida. La coneja tras recibir los golpes permanece agonizando en el suelo.
